Esclavos blancos y esclavistas negros, hasta hace 128 años

Durante varios siglos, flotas de esclavistas negros recorrieron las costas de Europa en busca de esclavos blancos, mano de obra barata. Aquellos blanqueros hicieron grandes negocios persiguiendo y capturando esclavos en el sur de península ibérica donde capturaron esclavos andaluces que encadenaron y esclavizaron. Antes de realizar sus incursiones en las costas de Galicia, del país vasco, de Francia, Alemania y Holanda, los blanqueros tomaron esclavos de color (blanco) en Irlanda, Escocia e Inglaterra.

En posteriores viajes los traficantes de esclavos llegaron a Noruega, Finlandia y Suecia.

Estos esclavos de color (blanco) fueron expuestos en plazas y mercados y vendidos en subasta en zonas en las principales ciudades de África y en sus colonias americanas, tierras pobladas por tribus aborígenes, poco aptas para el duro trabajo que los colonizadores africanos imponían en sus haciendas.

A base de la explotación inhumana, las ciudades y países de África y sus colonias obtuvieron gran desarrollo agrícola e industrial, en las ciudades se construyeron grandes monumentos y los blanqueros, grandes mansiones y empresas con el beneficio obtenido. Varios de ellos crearon bancos que financiaron el definitivo desarrollo de estos países…

Para la población, aquellos humanoides de color (blanco) eran animales que se compraban y vendían en función de su fortaleza y servilismo y las mujeres se tomaban como esclavas sexuales para satisfacer los placeres mundanos de sus dueños…

Para los blanqueros y los ciudadanos africanos, todos los blancos eran iguales y fueron recluidos en barracones, independientemente de su origen, pero como hablaban distintas lenguas y pertenecían a distintas culturas se originaron muchos tumultos, con pérdidas humanas que obligaron a sus dueños a clasificarlos y distribuirlos en distintos “cabildos” imponiéndoles olvidar sus lenguas, religiones y culturas, para adoptar las de los distintos países y culturas africanas donde fueron esclavizados. Especialmente los esclavos blancos de las tribus arias, se consideraban superiores a los blancos de otras tribus y los eliminaban sistemáticamente, especialmente a los de religión hebrea al igual que a otros esclavos de la tribu gitana

Hoy celebramos que hace 128 años que los dueños decidieron acabar con estas prácticas y ya son solo un mal recuerdo de tiempos pasados y de gente que consideraba su raza negra como un don divino que les permitió, a costa de la libertad, el sudor y la vida de millones de seres humanos de color (blanco) crear grandes fortunas y generar hermosas ciudades y empresas multinacionales que hoy dominan y gobiernan todos los países del mundo.

Esta fábula solo aporta un dato real pues fue en 1887 cuando en España se abolió la esclavitud. Aunque el resto es historia, contada a través de un negativo fotográfico…