
Alita: Ángel de combate: El mejor Anime que vieron mis ojos
Cuando se juntan dos directores de la talla de James Cameron y Robert Rodríguez, amigos desde hace 25 años, algo bueno tiene que salir. Buen trabajo de Robert Rodriguez, aunque se nota que es un proyecto de Cameron, y que Robert Rodriguez se ha dejado influir mucho durante el rodaje. Digo esto, porque más allá del trabajo de Rodríguez, que me ha encantado, se siente la mano de Camerón, para lo bueno y para lo malo.
Tras una larga planificación, James Cameron por fin hizo realidad llevar la obra de Yukito Kishiro al séptimo arte pero debido a su elección de estar frente al timón de la franquicia de Avatar, Robert Rodríguez toma las riendas de esta superproducción con Cameron y Jon Landau como productores de la misma.
Parece que mientras Hollywood cada vez hace mayores y peores truños en cuestión de super héroes, en donde todo está infantilizado hasta la náusea (Spy Kids parece algo salido de Sundance al lado de la bazofia Marvel y DC), y el exceso de CGI neón y planos de acción son idénticos en todas las películas (salvo joyas como Deadpool), las adaptaciones «live action» de los grandes exponentes del anime, los clásicos, van en dirección totalmente opuesta, AFORTUNADAMENTE. Después de la magnífica Ghost in the Shell, nos llego Alita, y quién sabe si la buena senda seguirá con una posible Akira. Esperemos que sí.
No solo se han dado cuenta de que a los fans les gusta ver escenas míticas y diálogos emblemáticos calcados, con sus detalles, sino que han sabido añadir contenido a la película original, adaptando el ritmo pausado nipón para no aburrir, pero sin irse al fast food de acción sin tregua, porque ese ritmo pausado es también un elemento que le gusta a los fans, y aquí han sabido encontrar un buen equilibrio para saborear el regusto anime original, y no aburrir a los legos en el asunto que van al cine a ver algo que no conocen. Y está hecho de manera magistral.
Lástima que no ocurra con las adaptaciones de videojuegos, que a menudo poco o nada tienen que ver con el juego original, y el resultado es peor que lamentable.
También debo decir que el trabajo de infografía para con el personaje de Alita es sencillamente demencial. Es la primera vez que no hay valle inquietante en una película con personajes de ordenador. Y eso que los rasgos de Alita son desproporcionados, pero lo han conseguido; y no solo eso, sino que no chirría al lado de personas de carne y hueso reales alrededor (y quizá, su hubieran buscado proporciones reales, o una actriz de carne y hueso 100%, se habría perdido esa magia). Será solo ordenador, pero Alita en esta película es lo más adorable que he visto en mi vida. Imposible no quererla. Un trabajo espectacular.
Y por último, hacer mucho hincapié en que es toda una sorpresa encontrar hoy en día una película con un personaje femenino bien escrito, tanto la protagonista como las secundarias, como Jennifer Connelly. Y me refiero a la mierda lavacerebros de las políticas de género y femidiotismo que nos tiene invadidos como una pandemia intelectual de retraso mental extremo.
Por fin una película en la que las mujeres son mujeres, con toda su feminidad, pero que no van impartiendo moralina feministoide, imitando a hombres, yendo de tipas super duras en plan chulo-piscina. Porque no es lo mismo escribir un personaje que sea poderoso y ponerle tetas y trenzas feministo-millennials porque es lo que mandan las tendencias, a escribir un buen personaje con todo lo que ello implica, fuerte, poderoso, y tremendamente interesante, que da la casualidad de que es una mujer.
Es la prueba de que a los que no somos unos payasos de lo políticamente correcto nos da igual, absolutamente igual que los personajes sean hombres o mujeres; al contrario que todas las huestes idiotizadas, obsesionadas con las cuotas. A nosotros nos gustan las historias, los personajes bien perfilados, sin importar lo que tengan entre las piernas. Ripley, Trinity, Motoko, Chihiro, Lara Croft, las replicantes de Blade Runner, Leia, Cersei Lannister, Beatrix de Kill Bill, Hit Girl de Kickass, Sarah Connor, Holly Golightly (Desayuno con diamantes), y podría alargar la lista interminablemente, son personajes bien escritos, extremadamente interesantes, que no son burda propaganda política, como la patética Rey del Star Wars de Disney o la más idiota todavía Capitana Marvel del cine (no la de los comics). Son personajes en su contexto (algunos más reales que otros), que da la casualidad de que son mujeres. Y si te interesa lo que digo acerca del contexto.
A lo que voy con el tema del contexto, es que hoy en día los pesados de la propaganda neo marxista/feminista, es que desbarran totalmente, no solo haciendo propaganda, sino cambiando el sexo de personajes históricos, solo para contentar a un sector de la población totalmente imbécil, como en el caso de Cazafantasmas. Eso por un lado, y por otro, lo que no puedes hacer es poner a top models de 50 kilos sin un átomo de músculo dejando KO a 10 tipos que la doblan en peso, y armados. Has de crear un contexto más irreal para eso, como en Tomb Raider, o incluso Kickass.
Lo que no se debe hacer es pretender que para ser jedi, tengas que pasar por un entrenamiento al estilo navy seal si eres hombre, pero si eres mujer lo tienes todo por ciencia infusa y manejas el sable de luz como si lo hubieras inventado tú. No hombre, eso no, el contexto ya estaba definido, y como la nena tiene vagina y ella lo vale, dicho contexto se lo pasan por el forro y nos presentan a una Mery Sue de manual. Mal, muy mal. Fenomenal para las supremacistas absurdas del pussy hat y los payasos aliados adictos a la soja, los estrógenos, y la humillación, claro…