
Las informaciones hablan ya de al menos 34 muertos y más dos centenares de heridos según los medios belgas. El aeródromo ha habilitado un número de emergencias y atención a las familias.
Al menos 34 personas han fallecido y más dos centenares han resultado heridas -último balance oficial- este martes en los atentados perpetrados en el aeropuerto internacional de Bruselas-Zaventem y en la estación de metro de Maelbeek, en pleno barrio europeo, según un primer balance oficial. Las autoridades han decretado el cierre de todas las estaciones de metro, tren y las operaciones aéreas. Se ha elevado el nivel de amenaza terrorista a 4. Se especula con que los atentados serían una respuesta al reciente arresto del terrorista de los atentados de París Salah Abdeslam
Los hospitales de la capital han lanzado un llamamiento a los ciudadanos para pedirles que acudan en los próximos días a donar sangre para atender a los heridos, cuando se restablezca el tráfico del transporte público y se estabilice la situación.
Charles Michel ha confirmado que las explosiones han sido dos «atentados terroristas». «Son atentados ciegos, violentos y cobardes. Nuestros primeros pensamientos están con las familias», ha declarado en una rueda de prensa rodeado de varios ministros de su Gobierno y del Fiscal federal.
El primer ministro ha marcado como prioridad la asistencia a las víctimas y ha apuntado, además, la adopción de medidas de seguridad «adicionales». Bélgica ha elevado al nivel máximo la alerta antiterrorista y reforzará, principalmente, el sistema de transportes.
El Centro de Crisis coordina la labor de las fuerzas de seguridad que continúan trabajando para «estabilizar» la situación y reforzar la seguridad en otros lugares de Bruselas y del resto del país considerados sensibles y sobre los que hay «preocupación», ha apuntado Michel.
«En este momento negro para nuestro país, quiero pedir calma y solidaridad. Enfrentamos una prueba difícil, debemos hacer frente a esta prueba estando unidos», ha afirmado Michel, que ha descrito este martes como un día «negro» para Bélgica.
En la misma comparecencia ante la prensa, el Fiscal federal, Frédéric Van Leeuw, ha detallado que en el aeropuerto se han registrado «dos explosiones, una de ellas probablemente obra de un kamikaze».