
Desde celebraciones en exteriores hasta fiestas temáticas en locales especializados. Con estas propuestas vas a acertar de pleno.
Los cumpleaños siempre son motivo de celebración, y cuando son protagonizados por los más pequeños de casa, todavía más. Durante una vez al año, los niños tienen ese momento tan especial en el que se reúnen con amigos, familiares, soplan las velas y acaban colmados de regalos que les recuerdan que siguen creciendo poquito a poco. Puede que a los más adultos no les acabe siendo un plato de mucho agrado ver cada vez más velas en la tarta, pero a un niño es algo que siempre le hará ilusión.
Y por eso, por la tremenda ilusión que les hace y porque se lo merecen, hay que prepararles una fiesta de cumpleaños a la altura. Una fiesta que no olviden hasta la próxima, que también hará lo posible por ser inolvidable. Contentar a los más pequeños no es tarea difícil, pero si se acude a la imaginación y se pone un poco más por parte de quien la organiza, se puede conseguir una explosión de alegría de esas que te llenan el corazón.
Aquí te vamos a traer una serie de ideas para que puedas montar una celebración de cumpleaños a la altura del peque. Cada uno tiene sus gustos, y cuando se trata de diversión, lo mejor es conocerlos al dedillo para que disfrute al máximo de ese día tan especial que es un cumpleaños.
Fiestas al aire libre
Si se celebra en una época en la que reina el buen tiempo, no hay nada mejor como montar algo en pleno aire libre. Los niños tendrán sitio de sobra para jugar, comer y corretear todo lo que quieran mientras los padres disfrutan también de la ocasión. Puedes terminar de rematarlo con castillos hinchables de los que proponen negocios especializados como hinchables Murcia. A los niños les encantan, y van a tener un sitio perfecto para dar unos saltos entre carrera y carrera.
Aprovecha tu jardín, monta una excursión o incluso id a alguna piscina municipal para que se refresquen en verano. La cantidad de sitios es abismal, y las posibilidades aún más todavía.
Fiestas temáticas
¿Son los pequeños amantes del fútbol, de los perros, de las princesas, de lo que sea? Quizá lo mejor sea aprovechar ese gusto para montar algo temático. Decora tu casa o el sitio donde se celebre con motivo del tema a tratar, incluso organiza juegos y actividades que tengan como base esa idea de la que parte todo el cumpleaños. Que se pinten, se disfracen si quieren y hasta coman chucherías tematizadas.
En exteriores, aprovecha para dar rienda suelta a tu creatividad. Puedes volver a optar por los servicios de empresas al estilo Hinchables Happy Party y montar un castillo o colchonetas decoradas en consonancia a la temática para conseguir todavía enriquecer más la fiesta.
En parques infantiles
Hay multitud de establecimientos especializados en celebrar fiestas de cumpleaños y aderezarlas con parques recreativos para que los niños puedan pasar una perfecta velada de juego. Puedes optar por lo más tradicional (piscina de bolas, toboganes y merendero), o por algo más novedoso como talleres de juegos o hasta salones preparados para fiestas de disfraces.
Si esta idea te parece la adecuada, recuerda llamar con antelación al sitio en cuestión y asegurarte una reserva para que no te quiten la hora y el día con otro cumpleaños. Valora el tamaño y posibilidades del lugar, porque mientras más grande sea, más espacio tendrán los niños para jugar y mejor lo pasarán. Para colmo, si se remata con una temática afín al cumpleañero, terminarás de poner la guinda en el pastel.
Son 3 ideas que abarcan un espectro lo suficientemente grande para aportar algo perfecto para el pequeño, o los pequeños, de casa. A partir de estas propuestas puedes empezar a desarrollar por tu cuenta y terminar de montar una fiesta de cumpleaños que ya no solo hará las delicias del cumpleañero, sino también de todos los asistentes. Y es que, si logras que los padres también se impliquen y se diviertan, habrás conseguido algo perfecto para ambos públicos y erradicado por completo el aburrimiento.
¿Es fácil contentar a ambos? No, pero tampoco es imposible. Si los padres ponen un poco de su parte y se quitan las vergüenzas de encima, pueden sumarse a los pequeños e incluso aprovechar estas fiestas para fortalecer aún más su relación y demostrar que ellos también saben divertirse. A veces todos tenemos que poner un poco de nuestra parte para que «esos locos bajitos» se sientan a gusto y disfruten totalmente de un día que ha sido pensado por y para ellos. Porque no lo olvidemos, el protagonista del cumpleaños siempre es quien sopla las velas.